DONDE BRILLA EL TIBIO SOL
Silvina Giaganti
“Somos del equipo de dársela de frente y ver qué onda”, le dice una amiga a la narradora de este libro, y define sin querer la poética de su autora. El cóctel que usa Silvina Giaganti (barrio, fútbol, padre) podría producir desastres, pero no.
Con el mismo tono entre frío y caliente con que le habla a un tipo que la carga en una plaza el día que Independiente se va a la B, Silvina encara los lugares comunes, los desarma y los vuelve a armar con corazón e inteligencia. También desarma, de paso, los fantasmas del agujero interior y produce con ojo de acero esta arqueología del yo que tiene algo de crónica periodística de la intimidad y mucho de metáfora poética a la mandíbula.
Independiente, dice, es el caballo de Troya donde se esconden los afectos que dinamitan todo. ¿Y yo que puedo agregar? Nada, lean Donde brilla el tibio sol, si es posible escuchando a Nino Bravo.