MANUAL DEL HINCHA
Roberto Fontanarrosa
‘En nuestro país no ser afecto del fútbol puede significar, lisa y llanamente, ser un marginado. Si usted nunca ha sentido ni siquiera el más leve escozor por el más popular de los deportes, seguramente muchas veces se habrá sentido como un paria. Habrá quedado excluido de largas y encendidas discusiones en la oficina o el club, vagará solo y cabizbajo por calles desiertas las noches en que se televisa un importante partido en directo.’
Desde el principio de los tiempos se sabe que toda persona puede cambiar de pareja, de género, de ideología partidaria o política, de religión, de nacionalidad incluso. Pero nunca, jamás, jamás de los jamases podrá variar su simpatía por un equipo de fútbol. Aquel fervor por determinado team que abrazó en su más tierna infancia y esa permanecerá inalterable hasta el último aliento. Ahora bien, para que esa condición sea reconocida en cualquier estadio, obviamente incluido el propio, el Negro Fontanarrosa dicta en las páginas de este Manual del hincha las reglas imprescindibles, precisas y claras para que usted se convierta en ese/a desaforado/a que dará hasta la vida por sus colores predilectos sin importar la adversidad de los resultados.